Los cristianos deben prepararse para el futuro, pero muchas personas se esfuerzan por conocer los eventos que le sucederán el futuro, creen que si lo saben estarán preparados para lo que suceda; por esa razón, los horóscopos, las líneas psíquicas, la lectura de las cartas y demás formas de adivinación son una de las industrias más lucrativas en nuestros tiempos.
Incluso personas muy inteligentes y poderosas recurren a psíquicos para tomar decisiones importantes, o simplemente, creen que los adivinos tienen poderes sobrenaturales que les pueden servir para alejarse de los peligros, tal es el caso de la ex-primera dama de los Estados Unidos, Nancy Reagan quien consultaba a una psíquica llamada Joan Quigley.
Presidentes acuden a los adivinos
Nancy Reagan se intereso en este asunto después del intento de asesinato que su marido sufrió el 30 de marzo de 1981. Ella le pregunto a Quigley si podía haberse prevenido dicho ataque, a lo cual Quigley respondió afirmativamente, esta era la respuesta que ella había esperado. Entonces la Sra. Reagan incorporo a Quigley como astrologa-asesora, con quien estableció conversaciones telefónicas permanentemente.
La señora Reagan más tarde escribió, “Muy pocas personas pueden entender lo que es tener a su esposo herido de bala y que casi muere y, a continuación, ser expuesto todo el tiempo a enormes multitudes, decenas de miles de personas, una de los cuales podría ser un loco con una pistola… yo estaba haciendo todo lo que podía pensar por proteger a mi marido y mantenerlo con vida”.
Todos los que visitan o llaman a estos adivinos tienen razones poderosas para hacerlo, piensan que la conocer el futuro les proporcionara una ventaja para prevenir un daño inminente. En el caso de la señora Reagan evitar el asesinato del presidente de los Estados Unidos.
No importa a cuantos adivinos acudan
Aunque millones usan a los adivinos para tomar decisiones importantes, los cristianos deben prepararse para el futuro en obediencia a Dios, otros simplemente lo hacen porque les intriga saber lo que les sucederá en el futuro. Más la palabra de Dios dice: “Y la persona que atendiere a encantadores o adivinos, para prostituirse tras de ellos, yo pondré mi rostro contra la tal persona, y la cortaré de entre su pueblo” Levítico 20:6
No importa que tan poderosa sea esa persona o cual sea la situación por la que está pasando, la Biblia es clara cuando dice que cualquier clase de adivinación es pecado. Las escrituras nos brindan un panorama completo del futuro para todos los seres humanos, pero en ninguna manera, le expone al hombre su futuro inmediato. De modo que pretender conocer el futuro es una necedad “El necio multiplica sus palabras. Si nadie sabe lo que ha de acontecer ¿quién le hará saberlo que después de él será?” Eclesiastés 10:14.
Profetas de Dios no son adivinos
Si bien es cierto que Dios envía profetas para dar dirección al pueblo, no todos los que dicen ser profetas lo son. Algunos cristianos acuden a este tipo de “profetas” para que les digan si deben o no casarse con cierta persona, quieren saber si Dios les dará el trabajo que andan buscando, o si tendrán un gran ministerio. Pero este deseo por conocer el futuro es precisamente el mismo anhelo que la gente del mundo tiene, lo cual es adivinación.
Los verdaderos siervos de Dios hablan únicamente lo que él les da que hablen, no lo que la gente quiere saber. Nadie conoce el futuro excepto Dios, de modo que la única preparación que podemos tener para enfrentar el futuro es cumplir con la voluntad de Dios, HOY.
Los cristianos deben prepararse para el futuro, obedeciendo los mandamientos de Dios y cualquier cosa que suceda en el futuro no importará; aunque venga un desastre natural o una tragedia familiar, sabremos que todo está en las manos de Dios. Nada absolutamente, sucede si no es la voluntad de Dios, asi que no podemos prevenir un terremoto, una inundación o un huracán y en el caso que esto ocurra, es imposible estar preparados.
Sometete a la misericordia de Dios
Solamente la misericordia de Dios puede evitar que una tragedia como esta nos alcance, pero si es necesario pasar por cualquiera de estos eventos, sepa que TODOS, están bajo el control de Dios.
Tampoco podemos evitar el día de nuestra muerte… es inevitable que esto suceda, pero si usted puede hacer un testamento, comprar un terreno en el cementerio o un seguro de vida para que sus hijos, hará menos traumática la experiencia de su familia ante su pérdida; en todo caso, todas estas acciones son solo un alivio a la perdida económica que representa perder al proveedor del hogar, sea el padre o la madre.
Sin embargo, nadie puede cambiar su futuro, aunque Usted se encierre en una caja antibalas, lo que Dios ha determinado…sucederá. Si nadie conoce el día y la hora de su partida, no importa lo que haga por evitarlo, seguro que jamás podrá estar preparado para ese momento.
Solo si su vida este rendida a Cristo podrá decir como Pablo: ”38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, 39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”Romanos 8:38-39.
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Yo me consideró cristiana pero tengo miedo de algunas superticiones. Ayudeme a perder este temor. Gracias